La seguridad vial es parte fundamental de la formación y educación ciudadana. Es una concepción para la promoción de una cultura de valoración y respeto por la vida propia y las de los demás.
Su importancia reside en la mitigación de los accidentes de tránsito mediante la educación basada en la prevención. Objetivos que se fortalecen con el SOAT y otros medios vinculantes.
Según lo dispuesto en la ley 1702 de 2013, la seguridad vial es “el conjunto de acciones y políticas dirigidas a prevenir, controlar y disminuir el riesgo de muerte o de lesión de las personas en sus desplazamientos, ya sea en medios motorizados o no motorizados”.
Así, todas y cada una de las personas que están en las vías, se incluyen en la formación que contempla la norma:
Todos enfocados en prácticas y conducción consciente, a través de hábitos y actitudes de seguridad preventiva.
El objetivo de la seguridad vial es prevenir accidentes de tránsito, principal causa de muertes y discapacidades en las personas a nivel mundial.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la accidentalidad por temas de tránsito con preocupantes:
Números que nos invitan a darle mucha más importancia a la seguridad vial, partiendo de que la mayoría de los accidentes ocurren por errores humanos evitables.
En Colombia, la ANSV representa al Gobierno Nacional como máxima autoridad en la aplicación de políticas públicas de seguridad vial. El ente que busca prevenir, reducir y controlar la siniestralidad vial.
Así, a través de acciones administrativas, educativas y operativas, busca concientizar y mitigar los accidentes de tránsito. Misión y visión que asume por medio de funciones puntuales como:
El PESV es el instrumento implementado en Colombia dentro del Plan Mundial para el Decenio de Acción de la Seguridad Vial. Mismo que contempla los siguientes puntos:
El PESV como herramienta busca la promoción de hábitos comportamientos y conductas seguras en las vías. De esta manera, previene riesgos, reduce accidentalidad vial y disminuye efectos nocivos asociados.